Durante la jornada del lunes 22 de julio de 2013, nueve jóvenes mexicanos que crecieron en Estados Unidos y que fueron deportados o salieron voluntariamente del país recientemente, fueron detenidos en Arizona cuando buscaban reingresar como parte de una protesta contra las políticas migratorias.
Cinco de los jóvenes fueron deportados en años recientes y buscaban regresar, mientras otros tres habían salido voluntariamente para participar de la protesta, con la que enfrentaron a las autoridades migratorias y las colocaron en la mira pública. El último de ellos se encontraba en Oaxaca, México, cuando decidió unirse a la protesta.
Como parte de una campaña de sensibilización, los jóvenes buscaron ingresar a Estados Unidos hacia Arizona a través de la ciudad de Nogales, donde se reunieron esa mañana. No obstante, fueron puestos bajo custodia por autoridades migratorias.
Los “Dreamers” –jóvenes que crecieron en Estados Unidos sin saber en muchos casos que eran indocumentados– recibieron la atención de Obama, cuando un decreto les otorgó la llamada Acción Diferida o DACA (2012), un programa que aplazaba las deportaciones para personas menores de 30 años, estudiantes y que hubieran llegado al país antes de los 16.
Cuando hacían la fila para entrar por el paso fronterizo de Nogales, el grupo de jóvenes vestía togas y birretes y llevaban consigo documentos de solicitud de asilo o libertad humanitaria bajo palabra.
Grupo de religiosos de distintas agrupaciones que participan como apoyo en la protesta de los Dreamers, esperan en el recinto en Nogales, Sonora, mientras el grupo de jóvenes se prepara para presentarse ante la Agencia de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP). Foto: Alonso Castillo
Cajas con expedientes de cada una de las personas que participaron en la protesta en contra de la reforma migratoria estadounidense. El grupo de jóvenes manifestantes se reunió en un pequeño restaurant junto a la línea fronteriza en Nogales, Sonora. Foto: Alonso Castillo.
Marco Saavedra de 23 años, integrante del grupo Dream 9, quien vivió en Nueva York y Ohio desde hace 20 años. Foto: Alonso Castillo.
Adriana Paola Gil Díaz se despide de su madre momentos antes de salir hacia las instalaciones de la Agencia de Aduanas y Protección Fronteriza. Foto: Alonso Castillo.
María Peniche, de 22 años, se abraza a uno de los voluntarios de la National Immigrant Youth Alliance (NIYA) previo a la salida al puerto de entrada a Estados Unidos donde pedirían asilo humanitario, en Nogales. Foto: Alonso Castillo.
Marco Saavedra se comunica con sus familiares desde un restaurante de Nogales, Sonora. Foto: Alonso Castillo
Integrantes del Dream 9 en el momento de la despedida antes de salir a presentarse ante las autoridades estadunidenses de migración. Foto: Alonso Castillo
Caminata de los Dreamers junto al cerco fronterizo en la ciudad de Nogales, Sonora. Foto: Alonso Castillo
Lulu Martínez ante las cámaras mientras espera su turno para ingresar por el puerto de entrada en Nogales, Sonora, hacia Estados Unidos. Foto: Alonso Castillo
Lizbeth Mateo en el puerto fronterizo antes de cruzar la frontera para entregarse a las autoridades estadunidenses. Foto: Alonso Castillo
Momentos en los que el último de los Dreamers es conducido a la unidad que los trasladaría al centro de detención (vista desde Nogales, Sonora). Foto: Alonso Castillo