A finales de 1994 un grupo de estudiantes universitarios visitamos Cuba con el pretexto de un taller sobre preservación y conservación de materiales fotográficos modernos convocado por Casa de las Américas en La Habana.
En el itinerario del taller se incluían visitas a instituciones educativas y culturales además de conferencias y exposiciones. Entre otras, en la Galería L que se encontraba entonces en un hotel (cuyo nombre no recuerdo) frente a la plaza Coppelia, se ofrecía una muestra de los tres jurados del Premio Casa de las Américas de ese año: Paz Errázuriz, de Chile, el cubano Alberto Díaz “Korda” y Edgar Moreno, de Venezuela.