40 días es el número más alto de días que he escuchado dura el trayecto desde que personas migrantes se internan en la ruta de México hasta alcanzar la frontera con Estados Unidos. En diciembre del 2004, los primos Ricardo y Hugo Méndez Faya, habían recorrido ya todo México desde Honduras y la frontera sur en Chiapas cuando entraron a Hermosillo en el tren de carga. Su objetivo era alcanzar la ciudad de Los Ángeles, uno de ellos para trabajar en restaurantería; el otro buscaba reunirse con su esposa. Yo los conocí en la estación del tren cuando hacían guardia esperando la salida.